Miriam Guzmán Guzmán

Enseñar no es transferir conocimiento; sino, crear las posibilidades para su producción o construcción; quien enseña, aprende a enseñar y quien enseña, aprende a aprender.

Paulo Freire

Este fue el camino que hace 32 años por casualida, o causalida, llevó a una joven a ser maestra.

En el año de 1979 era momento de decidir su fututo, había varias opciones, pero el destino quiso que el 1° de septiembre de ese año, Miriam Guzmán Guzmán ingresara al Benemérita Escuela Nacional de Maestros; durante cuatro años se preparó y finalmente el 30 de junio de 1983 egresa como Profesora.

Fechas que no olvida, el día se su examen profesional en junio de 1983 y el viaje pedagógico el 8 de julio de ese mismo año.

Resumir las experiencias de tan larga trayectoria es difícil, pero dos escurlas tuvieron la oportunidad de contar con tan honorable persona, la primera una escuela sin nombre, que más tarde sería llamada “Luis Brayle” por aquellos rumbos de Iztapalapa, en donde ejerció tres años.

Fue en 1988 cuando se integra a nuestra comunidad de “Club de Leones N°6” donde nos acompañó durante 28 años, siempre dando lo mejor de si, nunca dejando de aprender, pues su gusto por la psicología siempre estuvo presente, así como por el idioma Italiano, en constante preparación en cursos de matemáticas, artísticas, historia, arte y educación especial. Sin duda, una maestra ejemplar de la que no sólo los niños, sino sus compañeros aprendimos.

Y esque el ser maestra, el trabajo con los niños, el ver su capacidad de asombro y de aprendizaje es una experiencia que no cualquiera vive como ella lo hizo.

Maestra Miriam, sin duda alguna, la vamos a extrañar, pero el legado que deja en esta escuela y en cada uno de los niños que ayudó a formar, quedarán por siempre, no alcanzan las palabras para agradecer tan noble entrega.